El estudio de diseño londinense Bompass & Parr se asoció con científicos del laboratorio Aerogelex en Hamburgo, Alemania, para transferir las propiedades del material sólido más ligero del mundo a un postre comestible.
El aerogel fue inventado en 1931 por el químico estadounidense Samuel Kistler como parte de una apuesta que hizo con su colega científico Charles Lear, sobre quién podría reemplazar el agua en gel con aire, sin causar contracción. Con un contenido de aire de 95%/99.8%, el aerogel es reconocido como el sólido más ligero del mundo, por lo que tenía sentido para los diseñadores de Bompass & Parr intentar emular el proceso de fabricación del aerogel para crear el postre más liviano del mundo.
Los aerogeles se pueden hacer usando una variedad de materiales, pero para este proyecto especial Bompas & Parr se centró en los albuminoides, las proteínas globulares que se encuentran en las claras de huevo. Se propusieron crear un merengue, pero lo hicieron de una manera «ligeramente» diferente de lo habitual. Comenzaron haciendo un hidrogel de clara de huevo que luego se fundió en un molde, antes de sumergirlo en un baño de cloruro de calcio y agua.
El líquido en el gel de merengue se reemplazó con dióxido de carbono líquido, que se puede transformar en un gas en un proceso conocido como secado supercrítico. Finalmente, el gas se elimina del producto final, dejando solo el esqueleto del gel original. En este caso particular, el producto final es un postre de merengue que consiste en 96% aire, y pesa solo un gramo.
Conocido como el postre más ligero del mundo, el merengue se presentó en el Centro Rey Abdulaziz para la Cultura Mundial (Ithra) en Dhahran, Arabia Saudita, durante la Ithra’s Creativity Season Tanween, del 10 al 26 de octubre de 2019.
Fuente: www.periodismo.com