La bebida que logró conquistar el corazón de sus fieles seguidores poco a poco busca sumar nuevas aventuras en el paladar con productos naturales, saludables, sustentables y, por sobre todo, exquisitos.
La historia de la yerba mate tanto en Argentina como en Sudamérica data desde hace varios siglos. Su llegada a la mesa de los argentinos a través del tradicional mate es un hecho. Una larga jornada de trabajo en casa, un atardecer de relax o un desayuno lleno de energía son parte de los momentos especiales en los que se disfruta la compañía de esta bebida. Para algunos, imprescindible para dar comienzo al día, para otros, un ritual.
Su característico sabor logra fundirse en el paladar dando lugar a experiencias que rememoran la tradición argentina. Con el paso del tiempo, nuevas iniciativas suman productos naturales, saludables, sustentables y exquisitos. “Queremos demostrar que la yerba también puede sumar valor”, asegura Nancy Sabaryn, creadora de Susurro Nativo.
Una propuesta que combina la auténtica yerba mate misionera con hierbas y frutos regionales mediante exclusivos blends. “Nuestro propósito es ofrecer nuevos sabores a quienes hacen del mate un ritual de experiencias personales, con hierbas que ofrecen una lograda variedad de propiedades”, indica Sabaryn.
El origen de la marca surge en la historia de Nancy en la provincia de Misiones. “Aquí casi todos tenemos un abuelo o una abuela que nos regaló los sabores del mundo a través de sus tradiciones y cultura. Particularmente, en mi familia tengo abuelos y bisabuelos italianos, paraguayos, polacos y españoles. Susurro Nativo nació con la idea de trasladar ese fenómeno a la yerba mate, combinando una planta nativa, utilizada por los guaraníes mucho antes de la colonización, con hierbas y frutos del país y de otras partes del mundo”, explica su creadora.
Con un clima subtropical, en Misiones se produce yerba mate en suelos rojos que aportan un alto contenido de hierro. En ese sentido, Susurro Nativo procede de plantaciones ubicadas en el corazón de provincia, una biosfera inmejorable para la producción de hojas de alta calidad; y es elaborada mediante el sistema barbacuá, un proceso de deshidratación al calor de leños más un estacionamiento de 24 meses. Dicha maduración imprime un sabor amable y duradero que potencia las propiedades naturales de la yerba.
Un blend para cada ocasión
Susurro Nativo Lagos es un blend que propone aumentar la resistencia frente a la fatiga y el estrés, despejar la mente para una mayor concentración y estimular la fortaleza física. Por su parte, Susurro Nativo Montañas ofrece un delicioso compuesto que colabora en la regulación de los biociclos, al tiempo que renueva y repara el organismo; mientras que Susurro Nativo Brisas aporta una equilibrio a través de sus ingredientes naturales que ayudan a serenar la mente y otorgar un plácido bienestar corporal.
Asimismo, Susurro Nativo Remansos cuenta con unacomposición que colabora con un alivio saludable del organismo. Finalmente, Susurro Nativo Clásico está elaborada mediante el sistema barbacuá, ideal para degustar a cualquier hora del día.
“Es una yerba fácil de tomar, que gracias a sus ingredientes se expanden las sensaciones de activación o de relajamiento que nos produce el mate. Además, la propuesta es la de innovar en cuanto al packaging, que por lo general es muy tradicional. Nuestro pack está diseñado con la idea de ser coleccionable y recargable; con ilustraciones específicamente desarrolladas con el fin de poner en valor los biomas argentinos, su flora y fauna”, señala la creadora de la marca.
En cuanto a la fórmula perfecta para cebar mate, Sabaryn entiende que cada persona genera su propia impronta. “Cada uno tiene un estilo, su forma de armar, cebar y tomar mate y respetamos eso. Por eso decimos que hay mil maneras de tomar mate, y una, habla de vos”, asegura Nancy. Y agrega: “Particularmente, yo tomo a la mañana temprano mate para energizarme y elijo “Lagos”. Por la tardecita, elijo “Brisas”. Siempre con el agua a 80 grados”.
Un ritual que se transforma en una tradición de un país dueño de yerba mate única. Un hábito que se disfruta en cualquier ocasión y representa parte de las costumbres argentinas. Hoy, opciones como Susurro Nativo buscan resaltar su exquisito sabor y proponen aventurarse en un mundo de experiencias con nuevos sabores.
Fuente: Infobae.