Suele producirse un exceso de piel en el párpado superior, ya sea por envejecimiento o cuestiones genéticas, entre otros motivos. Un dermatólogo explica qué se puede hacer para revertir el proceso.
Como cualquier otra parte del cuerpo, el ojo también envejece. Las señales empiezan a ser más visibles en el rostro porque ahí la piel es mucho más fina y sensible. Los párpados representan el escenario central de algo más grande, que es la órbita, enmarcada por las cejas arriba y los pómulos abajo.
En la zona de los ojos, suele producirse un exceso de piel en el párpado superior que el paciente suele percibir como una caída del párpado. Este exceso de piel (dermatocalasia) puede asociarse con otros cambios como, por ejemplo, un incremento de la grasa, la caída real del párpado (ptosis palpebral) o la caída de la ceja. Esto provoca que el rostro poco a poco tenga un aspecto de cansancio y de mayor edad, algo que muchos desean evitar.
Andrés Politi (M.N. 73.970), dermatólogo, docente y miembro titular de la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD), explicó que la caída de los párpados, llamada blefaroptosis, es una condición que tiene que ver en parte con el envejecimiento de la piel, tiene algún componente genético y hay algunas enfermedades raras, como la blefarochalasis, que provoca la hinchazón y deshinchazón de los párpados, lo que culmina en caídas prematuras.
“Lo más común es que los párpados se caigan por envejecimiento de la piel o por cuestiones hereditarias. A veces lo que cae no es solamente la bolsa de la ceja para abajo, sino que la caída del párpado puede ir acompañada por la caída de la frente, es decir, la caída de la piel y los músculos de toda la cara. Como tratamiento se aplica la cirugía o un lifting haciendo un corte sobre la zona frontal”, comentó.
En ese sentido, el especialista aclaró que hay un montón de productos que pretenden mejorar la caída del párpado, pero no son exitosos. “El párpado es una zona difícil, por lo que no todos los productos son efectivos. Una solución cosmetológica es utilizar rellenos con ácido hialurónico que intentan ´engordar´ algunos puntos que traccionan la piel, logrando un efecto lifting”, precisó.
Blefaroplastia: una de las técnicas más populares
Ocupa el cuarto lugar entre las cirugías estéticas más frecuentes y con ella se busca mejorar la apariencia de los párpados.
Un artículo de la prestigiosa revista científica Ophthalmology Management puso en evidencia la relación que hay entre las selfies y un aumento de las blefaroplastias, ya que esta intervención tiene un fuerte impacto en la imagen de la cara.
Tanto es así que actualmente se hizo muy popular la cirugía para la caída del párpado superior (palpebral) en asiáticos, para “occidentalizar” los rasgos étnicos, especialmente en Corea.
Si bien, la causa más frecuente de la demanda es el rejuvenecimiento, existen otras funcionales o hereditarias que hacen que se operen también pacientes jóvenes con párpado caído, bolsas adiposas, etcétera.
Esta cirugía debe ser realizada por un cirujano plástico certificado, que podrá evaluar adecuadamente los cambios estéticos a realizar y detectar cualquier problema o contraindicación de origen oftalmológico.
La consulta más frecuente es por “mirada cansada o triste”, “párpados pesados por exceso de piel” que molestan la visión, las famosas “bolsas”, el exceso de piel y pequeñas arrugas en párpados inferiores.
Existe una gran variedad de técnicas quirúrgicas para tratar todos estos signos de envejecimiento de los párpados, pudiéndose, además, ser operados en forma separada cuando el defecto afecta solamente a los párpados superiores o inferiores.
El adelanto técnico más significativo es el de poder extraer las bolsas por vía transconjuntival, es decir sin ningún corte en la piel, ideal para los pacientes más jóvenes. Sin embargo, la metodología también es muy frecuente para la corrección de ojos hundidos, patas de gallo, ojeras y microarrugas que van más allá de la edad del paciente.
Es aquí donde últimamente los procedimientos no invasivos cobraron una gran relevancia, tales como: toxina botulínica, peelings químicos, rellenos volumétricos con ácido hialurónico, plasma rico en plaquetas, microneedling yshocks vitamínicos transdérmicos.
Tanto los tratamientos cosméticos quirúrgicos como los no invasivos de los párpados son muy populares y aceptados por mujeres y hombres, ya que permiten una inmediata reinserción social y laboral con grandes mejorías visibles.
Fuente: tn.com.ar