En temporada de altas temperaturas es necesario tomar recaudos para cuidar las plantas, con algunos trucos, para que no hayan muerto antes de que regresemos de las merecidas vacaciones.
Muchos amantes de las plantas sufren cuando tienen que dejar a sus más mimadas, solas, en casa. Algunos hasta contratan personas o llaman a amigos y familiares para que se las rieguen, como sucede cuando también solicitan asistencia para la alimentación de las mascotas. Es importante tener presente que en temporada de calor, las plantas necesitan riego con más frecuencia y la debida exposición al sol, más si son de interiores, pero existen trucos para poder protegerlas cuando estemos ausentes por algún tiempo.
En temporada de verano, las plantas van a absorber el agua mucho más rápido, puesto que se evaporará con más velocidad y se secará la tierra, lo que puede suceder que mueran por deshidratación. En invierno, hay que tener cuidado con la humedad, no regalas de más para que no se pudran y evitar que la tierra se llene de hongos, lo que provocaría que muera, también. Cuando procedemos al riego, los expertos recomiendan girarla 90º, en rotación, para que puedan recibir la misma exposición, todas sus hojas.
Las plantas no deben ser colocadas cerca de puertas y ventanas o de fuentes de calor o aires acondicionados, para que su ambiente no se reseque. Cuando se sale de vacaciones, los expertos recomiendan “agrupar las plantas en una estancia donde puedan recibir luz indirecta”, así como también “preparar algún sistema de riego con depósito de agua”.
Existen muchos tutoriales en sitios de Internet, como YouTube, en dónde se enseña a instalar sistemas de riego caseros, como “colocar un recipiente con agua y, mediante un cordón grueso de algodón, introducir un extremo del cordón en agua y el otro extremo” en la tierra de la planta, lo que genera un “riego por capilaridad”. Otros, “clavan” el pico de botellitas llenas de agua, en la tierra, para que se vaya consumiendo y existen macetas que tienen un compartimento para llenar de agua y que las raíces se alimenten por sí mismas.