Con el objetivo de ahorrar en las facturas de luz y gas, existen algunos hábitos que necesariamente deben evitarse al usar la cocina.
De los sectores del hogar, la cocina es uno de los que mayor gasto realiza debido al gran uso de energía y gas. Ante los reiterados aumentos en estos servicios, es necesario buscar otras alternativas o maneras de consumir menos para cuidar el bolsillo.
Se calcular que, aproximadamente, un 30% del total de consumo de energía y gas proviene de la cocina. Esto se debe a una serie de hábitos que se realizan a la hora de hacer uso de esas instalaciones, y que se pueden cambiar. Por eso es de suma importancia que cuando se realiza una instalación eléctrica nueva o se renueva la que ya está se elijan electrodomésticos eficientes, pero de menor consumo, lo cual los convierte en más “verdes”.
Con el objetivo de aminorar el gran monto de las facturas provenientes del usar la cocina, se recomienda 12 hábitos que pueden ayudar a consumir menos:
- Heladera de bajo consumo y bien limpia: Es el aparato más costoso de la cocina, pero es el único que no puede desenchufarse debido a la gran variedad de alimentos que resguarda. Sin embargo, es necesario mantenerla limpia y procurar no estar abriendo y cerrándola reiteradas veces.
- No usar utensilios mayores que las hornallas: Se calcula que cocinar con una sartén de 15 centímetros de diámetro en un fogón de 20 de una cocina eléctrica, significa desperdiciar un 40% de la energía producida.
- La cantidad de alimentos debe adecuarse a la sartén u olla: Es necesario que el tamaño sea similar debido a que sino se requerirá más tiempo de cocción y conllevará un mayor gasto de gas o energía.
- Descongelar los alimentos: Cocinar alimentos previamente descongelados que ponerlos directamente al fuego del horno o microondas.
- Cocinar para varios días y congelar: El preparar comidas para varios días puede ayudar a ahorrar tiempo y consumo de energía.
- Ollas a vapor eléctricas: La adquisición de estos aparatos son de una gran ayuda a la hora de gastar menos energía.
- Horno que se apaga sigue calentando: Poner en piloto o apagar el horno ayuda a controlar el gasto.
- No abrir el horno a cada rato: Es de suma importancia evitar que cada vez que uno vaya a la cocina se acerque a abrir el horno para verificar que la comida esté hecha debido al desperdicio energético que provoca.
- Buenas ollas ahorran energía: Es importante realizar una inversión en elementos de buena calidad para evitar el consumo innecesario de energía.
- Hornalla apagada sigue cocinando: El quemador sigue produciendo calor residual una vez apagado, por lo que es recomendable apagarlo unos minutos antes del tiempo de preparación.
- Hervir con la cantidad justa de agua: Si bien es preferible cocinar a vapor, también se recomienda hacer la porción de agua justa para hervir y no malgastar gas.
- Pasta que sobra se guarda en el freezer: Las sobras de la comida pueden ser guardarlas con el objetivo de ser reutilizadas en otras recetas.
Fuente: la100.cienradios.com