En una reciente conversación con RegiónNet, el Intendente de Avellaneda, Gonzalo Braidot, abordó la creciente dificultad para acceder a terrenos en la ciudad y la importancia de la intervención estatal en este ámbito.
Braidot destacó que, en generaciones pasadas, era común que una persona pudiera adquirir un terreno al iniciar su vida laboral, incluso antes de casarse. Sin embargo, hoy en día, esta posibilidad es casi inexistente, independientemente de si se cuenta con un salario. «Con un sueldo de comercio, es inviable conseguir un terreno a través del sector privado debido a la especulación del mercado», señaló el Intendente, subrayando la necesidad de que el Estado intervenga para facilitar el acceso a la tierra.
El municipio, en colaboración con la Fundación Progresar y la Cooperativa de Servicios Públicos, trabaja de manera coordinada para ofrecer soluciones a esta problemática. Braidot explicó que la Fundación Progresar fue creada con el objetivo de ayudar a un sector de la población que, con un trabajo estable, pueda acceder a una cuota accesible y así avanzar en la adquisición de una vivienda propia.
El Intendente también mencionó el desafío que representa la especulación con los precios de las tierras, especialmente cuando decisiones gubernamentales, como el cambio de la línea de urbanización, pueden incrementar drásticamente su valor. En este sentido, Braidot destacó la importancia de debatir sobre cómo la plusvalía generada por dichas decisiones debería tener una devolución a la comunidad.
Finalmente, Braidot subrayó la necesidad de que el Estado no solo adquiera terrenos, sino que también participe en la generación de plusvalía, promoviendo que los propietarios cedan parte de sus tierras para desarrollar loteos de carácter social. «Es fundamental que el Estado trabaje en conjunto con los propietarios para garantizar que la comunidad pueda acceder a terrenos y, en última instancia, a una vivienda propia», concluyó.
Fuente: RegiónNet.