La Organización Mundial de la Salud dispuso celebrar el 8 de julio como el Día Mundial de las Alergias, con el objetivo de concientizar acerca de la importancia de educar sobre esas enfermedades que se encuentran entre las seis patologías más difundidas.
Las enfermedades alérgicas ocupan un lugar relevante en la salud pública en todo el mundo, ya que están entre las seis patologías más importantes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió celebrar el día 8 de julio como el Día Mundial de la Alergia, con el objetivo de concientizar a toda la población acerca de la importancia de educar sobre las enfermedades alérgicas.
La alergia es una respuesta exagerada, y algunas veces desmedida, del sistema inmunológico del organismo. Ocurre como consecuencia del contacto de ciertas sustancias denominadas alérgenos, presentes en el medio ambiente o en el propio hogar y que normalmente no hacen daño(entre ellos, los ácaros, el pelo de mascotas, ciertas plantas, alimentos, fármacos, algunos insectos) con personas que tienen antecedentes genéticos(susceptibles), sea por herencia directa de sus padres o por familiares cercanos. Otro factor para tener presente es la polución ambiental, tanto en los lugares cerrados (humo de tabaco y otros químicos) como al aire libre (las partículas diésel, entre otras), que potencia la alergenicidad, porque actúan como transportadoras de estas sustancias y empeoran la rinitis o el asma.
El sistema inmunológico de las personas susceptibles desencadena un proceso inflamatorio como respuesta, con niveles altos de inmunoglobulina E (IgE), que es un tipo de anticuerpo.
La consecuencia de la unión entre el alérgeno y los anticuerpos es una salida abrupta de mediadores inflamatorios: los mastocitos liberan histamina, causa de los síntomas inmediatos. Al cabo de algunas horas, otro grupo de células formado por los eosinófilos libera otros mediadores como la proteína básica mayor o la proteína catiónica, entre otros, y aparecen más síntomas.
Hoy en día, entre 400 a 600 millones de personas en todo el mundo padecen algún tipo de alergia. Se calcula que, para el año 2050, la mitad de la población mundial sufrirá de alguna alergia, en vista del aumento de la polución ambiental y de los cambios en el estilo de vida.
Entre las enfermedades alérgicas más prevalentes están el asma y la rinitis alérgica. Según la OMS, aproximadamente 300 millones de personas tienen asma y, de ellas, el 80% tiene rinitis alérgica. Ambas patologías constituyen un problema de salud importante, con altos costos directos e indirectos para el sistema sanitario.
Entre los profesionales dedicados a estas enfermedades es muy común el concepto de “marcha alérgica”.
Se llama marcha alérgica a:
– La presencia de alergia gastrointestinal (en general, alergia a las proteínas de la leche de vaca) en los primeros meses de vida.
– Luego aparece el eccema atópico, que dura hasta aproximadamente los 3 o 4 años de vida.
– Más tarde, entre los 6 y los 12 años, se presenta la rinitis alérgica.
– El asma también puede aparecer en etapas muy tempranas de la vida y mantenerse en el tiempo.
Es muy importante diagnosticar estas enfermedades, ya que el subdiagnóstico llevaría a realizar subtratamientos y tratar la consecuencia, en lugar de buscar la causa y brindarle al paciente la mejor calidad de vida.
En el contexto actual de la pandemia mundial de COVID-19, las personas con este diagnóstico requieren más cuidados, ya que no se trata de un problema banal. Por este motivo, el objetivo es concientizar a pacientes y profesionales para cubrir las necesidades que puedan aparecer.
Fuente: www.infobae.com