El orégano es una de las plantas que fácilmente puede crecer en una taza que tengas en tu casa. Los cuidados que hay que seguir.
Fácil y rápido. El orégano es una de esas plantas que pueden crecer en taza y decorar tu hogar, ya que no solo es muy linda, sino que también tiene un aroma muy peculiar. Pero eso no es lo mejor de todo: es fácil de cuidar y perfecto para que agregues un poco a tu comida.
Para plantar orégano en taza solo hay que seguir unos sencillos pasos y vas a poder ver los resultados en poco tiempo. Para lograr una planta de orégano lo primero que necesitamos es una taza, aunque también se puede utilizar cualquier maceta que tengamos en casa.
Lo ideal es que sea una taza vieja, no la que más nos guste ni la preferida. Lo primero que tenemos que hacer es colocar un trozo de cinta adhesiva en la parte inferior. Después, vamos a necesitar un pequeño taladro: hacemos un agujero en el centro de la cinta adhesiva. Este agujero va a permitir que la tierra se drene y no se ahogue la planta.
Luego viene la parte de colocar el orégano en la taza. Hay que poner la tierra en la taza y hacer un agujero en el medio de la tierra, trasplantar la planta de orégano a la taza y cubrirla con más tierra. Si lo deseamos, podemos añadir abono para que se fortalezca y crezca más rápido.
Como cualquier otra planta, necesito de algunos cuidados específicos. Por eso, hay que regarla regularmente y siempre tenemos que asegurarnos de que el agua drene bien. Nunca, pero nunca tenemos que ahogarla.
Muchos chefs aseguran que el orégano es una hierba imprescindible en un jardín culinario. Es un ingrediente aromático, picante, picante y ligeramente amargo, combina bien con casi cualquier preparación vegetal. Esta antigua hierba culinaria se originó en la zona montañosa de Grecia y ahora se cultiva en todo el mundo.
