Consejos para prevenir las huidas y estimular a nuestros amigos felinos para que regresen al hogar.
Los gatos son animales muy independientes que a la vez adoran estar con nosotros. Pero la curiosidad instintiva a veces los invita a explorar el entorno causándonos el incordio de la angustia de no saber dónde están y si están bien o no.
La conducta de los gatos escapando de la casa y vagando por el vecindario es relativamente habitual y se puede considerar normal.
Los gatos pueden escaparse de casa por las siguientes razones:
– Reproductivo-genitales: ocurre con los gatos machos no castrados cuando perciben alguna hembra en celo y se escapan para buscarla.
– Como huida o escape (por miedo intenso): el problema en estos casos es puntual. El gato se escapa solamente cuando aparece el estímulo amenazante, o se trata de un problema constante, creciente y progresivo, y entonces el gato detecta que su territorio no es seguro. – Por falta de estímulo o de enriquecimiento ambiental: es el caso de los gatos que no poseen juguetes o interacción suficiente en su entorno habitual y la buscan en otros lugares explorándolos
Puede ocurrir al incorporar inconsultamente un nuevo gato y el animal percibir que el entorno le es hostil. La personalidad y el aprendizaje previo también influyen. Ya que los gatos que siempre salieron tenderán más a salir que aquellos que siempre estuvieron adentro
Para evitar la conducta de fuga es imprescindible detectar cuál es la causa de esa conducta y actuar entonces en consecuencia. La castración es una buena medida cuando la motivación es sexual, pero hay que considerar que no haya habido acostumbramiento anterior a las salidas. La instalación de vallas y dificultades para el escape pueden ser medidas auxiliares exitosas.
Enriquecimiento ambiental
La adecuada estimulación dentro de casa, disminuirá la necesidad de salir de la casa. Es importante brindarle a nuestro gato juguetes que les permitan simular una situación de caza; rascadores adecuados en la ubicación correcta y proporcionarle estructuras elevadas, cajas donde esconderse, zonas de descanso tranquilas, etc.
Procurar un ambiente agradable para el gato
El entorno debe ser tal que nuestro gato se sienta seguro y libre de estrés. Cuando los gatos se escapan por miedo, debe identificarse claramente el estímulo amenazante y reducirlo o evitarlo o habituar al gato a él.
Recompensar al gato cuando regresa
Deberíamos premiar al gato con comida apetitosa cuando regrese, para reforzar esa conducta de regreso a casa. Si en casa hay un ambiente agradable y el motivo de fuga no es por miedo, suelen regresar. No obstante, un gato cuando se escapa no lo hace, exagerando, a más de dos o tres cuadras de su entorno habitual.
Los principales riesgos de los gatos escapistas son los accidentes, las caídas, las intoxicaciones y las peleas entre gatos u otros animales. Prevenir los escapes involucra tener el plan de vacunas al día para evitar contagios en la excursión, colocar redes que impidan las salidas e identificar con un collar especial para gatos (son elásticos y evitan ahorcamientos por accidente) y chapita identificatoria poniendo un celular de referencia.
Cuando un gato escapista regresa hay que revisar que no tenga heridas ni lesiones y que su comportamiento normal, ya que un cambio de conducta puede identificar dolor, intoxicaciones, u otros problemas . Concurrir a nuestro veterinario de confianza es sin duda el mejor de los consejos.
*El Prof. Dr. Juan Enrique Romero @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.
Fuente: www.infobae.com