Limpiar la heladera profundamente es muy necesario para que el aparato funcione bien y mantenga los alimentos correctamente refrigerados.
Cuando limpiamos la cocina, más allá de lavar la vajilla, repasamos los azulejos y la puerta del horno. Ese es el momento en que solemos limpiar la heladera por fuera: una repasada con un trapo húmedo suele ser suficiente.
Pero es necesario limpiar la heladera más detalladamente: su interior, las gomas de la puerta y hasta el motor requieren un determinado cuidado. Y tampoco hay que exagerar y limpiarla todas las semanas.
Por eso te recomendamos tener cuidado con cada parte de tu heladera, y tener en cuenta cuanto tiempo debe pasar entre una limpieza y otra en cada caso.
Puertas
Al ser el elemento que está en contacto con los vapores y la grasa de la cocina, es el que más se ensucia. Y muchas veces abrimos las puertas con las manos sucias, y dejamos nuestra huella.
Por eso lo ideal es repasar las puertas de la heladera cada dos o tres días a lo sumo. Hay que óder especial cuidado en las manijas.
Estantes y cajones
Como es el lugar donde apoyamos los alimentos debe estar bien limpio siempre. Una vez a la semana, hay que pasar una solución de bicarbonato, limón y y agua, que limpia, desinfecta y desengrasa.
Bandas de goma
Son el sello de las puertas, y suelen acumular polvo en sus pliegues. Una vez cada dos o tres meses, cuando notes que se están oscureciendo, alcanza para mantenerlas limpias y prolijas.
Rejilla posterior
Esta zona suele llenarse de pelusas y polvo, por lo que se limpia con la aspiradora, cuidando de no tocar los caños o el motor. Dos veces por año es suficiente, salvo que notes que está muy sucia.
Interior y freezer
Cada heladera viene con un manual de instrucciones del fabricante, que indica cada cuanto tiempo es conveniente descongelar totalmente el aparato en cada caso. Salvo que se forme hielo en el interior del freezer, es importante respetar el tiempo estipulado.
Sí es importante limpiar la heladera en su totalidad cada dos meses. Se debe retirar todo el contenido, revisar que no esté vencido o en mal estado, y limpiar con agua, bicarbonato y limón las paredes, estantes y anaqueles.
Fuente: lt10.com.ar
