Albar Tessier, un maestro ciego francés, llegó recientemente a Bolivia para prepararse para un desafío agotador: recorrer 140 kilómetros en el Salar de Uyuni, el desierto de sal más grande del mundo, en solo siete días.
Tessier, que enseña a niños ciegos en su país de origen, se planteó este desafío personal antes de perder por completo su visión y, según los informes, ha estado entrenando durante los últimos años. Quiere mostrarle al mundo que las personas con discapacidades también son capaces de realizar hazañas increíbles, y para ello viajará solo, guiado solo por audio GPS, y con un equipo de emergencia manteniendo una distancia segura.
El épico recorrido de Albar Tessier por el Salar de Uyuni está programado para comenzar hoy, y se extenderá hasta el 23 de julio. El francés espera cubrir una distancia de 20 kilómetros por día, una hazaña desafiante incluso para personas sin discapacidades, teniendo en cuenta las condiciones especiales de este lugar. A pesar de ser casi completamente plano, el Salar de Uyuni se encuentra a unos 3.650 metros sobre el nivel del mar, con temperaturas que fluctúan entre -3 y 20 grados centígrados.
Para hacer su viaje aún más desafiante, el maestro ciego eligió la ruta más larga a través del blanco desierto, saliendo del pueblo de Llica y caminando 140 kilómetros hasta el pueblo Colchani. Arrastrará un trineo lleno de agua, sacos de dormir y suministros, y será seguido de lejos por su médico y un equipo de emergencia, en caso de que algo salga mal.
Tessier le ha pedido a su equipo que se mantenga a una distancia segura detrás suyo, y que no le ofrezca ningún tipo de apoyo a menos que él lo pida, vía radio satelital. Para ayudarlo a encontrar su camino, el francés usará un dispositivo de audio GPS.
El Salar de Uyuni tiene una superficie de 10.582 kilómetros cuadrados y contiene entre el 50% y el 70% de las reservas mundiales de litio. También es una de las atracciones turísticas más importantes de Bolivia.
Fuente: www.periodismo.com