Desde RegiónNet hablamos con el Dr. Gabriel Vénica quien nos aclara motivos del rechazo al cramdown.

VICENTIN es una empresa concursada como tantas en un país en ruinas…

Pero que siguió trabajando…

Sin dejar de pagar sueldos…

Sin despedir personal…

Sin contraer nuevas deudas…

Con demanda y precios firmes de sus productos…

Con una propuesta de pagos que incluye la incorporación de tres jugadores de primer orden -Viterra, Bunge y Asociación de Cooperativas Argentinas- con gran experiencia internacional, que se hacen cargo de las deudas, que garantizan inversiones y que Vicentín mantenga raigambre regional (la Unión Agrícola es la principal cooperativa de ACA) …

Con una familia propietaria que sacrifica el 95% del sus acciones; lo que no hubiera sido necesario si el gobierno no se hubiera entrometido a estropear todo con expropiaciones, congelamiento de cuentas, trabas a las exportaciones, hostigamiento jurídico y burocrático, cajoneo de informes (BNA), ataques demonizadores por la prensa y bloqueos salvajes a las plantas realizados por gremios aliados al partido gobernante… Agregaría entre paréntesis el pedido de quiebra que hizo la empresa constructora vial patagónica, propietaria de la estancia “El Calafate”, haciendo naufragar el acuerdo extrajudicial inicial, que hubiera sido lo mejor para todos…

Con una propuesta de pago aprobada por una amplia mayoría de acreedores -la casi totalidad de los privados, incluidos bancos internacionales-, con la vergonzosa excepción de los bancos nacionales (Nación y Provincia), de la AFIP y de un acreedor privado (Commodities Grasi) vinculado al gobierno…

Con todo esto, podemos decir “VICENTIN NO NECESITA QUE LO SALVE EL GOBIERNO”, “NECESITA SER SALVADO DEL GOBIERNO”.

Sin embargo, a pedido del mismo gobierno y del grupo Grassi, el Juez Lorenzini rechazó (o sea, no homologó) la propuesta de pago e inversiones que propuso la empresa e impulsó en su lugar el “cramdown” o “salvataje” reclamado por los susodichos. Increíble…

El cramdown o salvataje es una figura excepcional que se incorporó con mucha resistencia a la ley de quiebras y concursos (art 48) con el objetivo de salvar la fuente de trabajo en los casos en que FRACASE EL CONCURSO DE ACREEDORES. NUNCA FUE PREVISTO PARA HACER FRACASAR AL CONCURSO y menos para poner en riesgo de quiebra a una empresa que mantiene su moderna capacidad operativa a pleno.

El cramdown o salvataje es un bisturí para salvar la vida del paciente en casos extremos cuando no quedan otros remedios; no para asesinarlo cuando está vivo y mejorando…

Ni para improvisar terapias cuando las conocidas funcionan.

VICENTIN NO NECESITA QUE LO SALVE EL ESTADO. NECESITA SER SALVADO DEL ESTADO

                                                                                                 Dr. Gabriel Vénica

Fuente: Dr. Gabriel Vénica y RegiónNet.