Las cejas son una parte clave del rostro a la que mucha gente teme tocar.
Aunque mucha gente se siente tentada de darle un retoque a sus cejas en casa, muchas veces se arrepienten por miedo a causar daño irreparable. La verdad es que, como todo lo relacionado al rostro, la realidad es menos terrible de lo que parece. Sin embargo, tener algunas cosas en mente puede infundir seguridad y confianza a la hora de acercar una pincita a las cejas.
1. Nunca las depiles por completo
Esto puede sonar dramático, pero es clave. Siempre habrá lugar para hacer nuevos retoques, pero una vez que retires vellos de más, solo el tiempo lo puede arreglar. Por este motivo, retirá cada pelo cuidadosamente y, ante la duda, dejalo ser.
2. Elegí tu ceja según la forma de tu rostro
La forma del rostro puede ser una guía útil a la hora de decidir qué forma de ceja te sentará mejor. Si tu cara es ovalda, los diseños más finos con un ángulo en la curva serán los más aptos, mientras que las cejas de forma similar pero más gruesas suelen favorecer más a los rostros redondeados. Las cejas curvas y sin ángulos son ideales para caras en forma de corazón, mientras que las cejas con ángulos más marcados y líneas más rectas favorecen a aquellas personas con rasgos alargados y angulosos.
3. Buscá un maquillaje de acuerdo con el color de tu cabello
Si tu ceja tiene zonas despobladas donde sea necesario rellenar con maquillaje, guiate por tu color de pelo para elegir qué tono de color colocar. De esta forma, evitarás errores comunes como maquillar la ceja muy oscura cuando tu pelo en realidad es rubio o viceversa.
4. Cuidá el espacio entre ellas
Una forma muy simple de saber qué tan separadas deben ir tus cejas es alineándolas a tus fosas nasales. Para encontrar la distancia ideal: trazá una línea recta imaginaria que vaya desde los costados de tu nariz hasta tu frente, pasando por el lagrimal. Todos los pelitos del medio pueden ser retirados si así lo deseás.
5. Usá un stencil para practicar
Dibujar una ceja es mucho más difícil de lo que parece, y si apenas estás comenzando a practicar lo mejor es utilizar un stencil para hacerlo, sobre todo en aquellos casos donde el pelo natural es escaso y hay mucho espacio que rellenar. Los sténciles para cejas vienen en una variedad muy amplia de formas y tamaños y solo deben colocarse sobre la zona y rellenarlos con sombra del color adecuado.
6. Maquillá buscando un look natrural
Como las cejas naturales tienen más intensidad en la zona del centro, es ideal seguir este modelo para evitar que las cejas no se vean muy artificiales en la zona donde comienzan y donde terminan. Para maquilar cejas podés usar sombra en polvo y aplicarla con una brocha. Si esto no es tu preferencia, podés optar por un delineador para retocar tus cejas.
7. Dale consistencia a tu diseño
¡Buscá resultados realistas! Es mejor intentar rellenar y diseñar las cejas naturales antes que crear de cero una forma nueva. Asimismo, es importante practicar y lograr un estilo que te resulte cómodo y fácil de replicar. Las cejas tienen un efecto importante en el aspecto final del rostro, por lo que darle consistencia y tener siempre las mismas será ideal para lograr ese efecto natural.
8. Cepillalas y peinalas
Algunas veces no es necesario maquillar por completo las cejas, sino que basta con peinarlas para conseguir que todos los vellos se alineen y obtengan una forma definida. Además, esto ayuda a estimular su crecimiento y a mejorar su apariencia de forma natural. Podés optar por un gel de cejas transparente que ayude a fijar los vellos en su lugar.
9. Depilá de a poco pero con constancia
Una vez que encontraste tu forma ideal de cejas… ¡No te cuelgues! Es más fácil mantener la forma que tener que recrearla otra vez porque el vello creció demasiado. Cuando los pelitos empiecen a asomar, retiralos con cuidado. Esto también ayudará con el dolor, ya que tendrás que retirar menos vello al mismo tiempo.
10. No te obsesiones
Dicen que las cejas son hermanas, pero no gemelas. Así que si bien debés tener cuidado de que su color, grosor y largo sean similares, a veces está bien que alguna de ellas tenga un pequeño detalle diferente. Después de todo, ningún rostro es 100% simétrico y, si lo que buscás es un efecto natural, la asimetría es parte de eso.
Fuente: www.airedesantafe.com.ar