Mucho se ha dicho sobre los zurdos y los diestros, pero nunca se había profundizado en lo que influye para que sean de una u otra manera.
A lo largo de la historia, mucho se dijo sobre los zurdos y los diestros, pero en esta ocasión se llegó a una valiosísima conclusión sobre los factores que definen que sean de una u otra forma.
A diferencia de como se creía años atrás, no es el cerebro el que lo determina sino que lo define la médula espinal.
Así lo argumentó un grupo de expertos, encabezado por Sebastian Ocklenburg, Judith Schmitz, Onur Gunturkun y otros especialistas de Países Bajos y Sudáfrica, que publicó los resultados de su investigación en la revista eLife.
Según explicaron sobre los zurdos y los diestros, la actividad genética en la médula espinal ya es asimétrica en el útero. Es decir, ya desde el crecimiento del feto en el útero muestra preferencias por una u otra mano antes de las 15 semanas.
Lo cierto es que la corteza motora del cerebro y la médula espinal todavía no están conectadas, esto señalaría que el feto ya puede iniciar movimientos y elige una mano preferida antes de que el cerebro empiece a controlar el cuerpo en su totalidad.
A su vez, los investigadores indican que también influyen factores ambientales durante el embarazo para elegir una u otra mano.
Fuera de este estudio científico y a lo largo de las décadas, los zurdos fueron mal vistos (aunque muchos no lo crean) a diferencia de los diestros.
Por ejemplo, en la Edad Media, las personas que escribían con la mano izquierda eran acusadas de brujería o de estar poseídas por el diablo. Incluso más cerca en el tiempo, en el siglo XX, los profesores y padres trataban de reeducar a los niños zurdos para “convertirlos” en diestros.
Además, los científicos de ese tiempo solían pensar que ser zurdo estaba relacionado a un daño cerebral menor en el desarrollo temprano.
Fuente: la100.cienradios.com