Mantener limpio el cabezal de la ducha es esencial para eliminar residuos y que el agua fluya mejor.
Si bien puede que muchas personas no le presten atención, mantener limpio el cabezal de la ducha es esencial para que el agua fluya de una mejor manera al momento de bañarse. Esto debido a que pueden quedar residuos minerales en los orificios que obstruye la salida del agua. Por esto mismo, hay distintos métodos para mantenerlo limpio y la mayoría tiene un ingrediente en común: el vinagre.
Método 1
El primer método consiste en sumergir el cabezal en vinagre. Se debe quitar de la ducha y verter vinagre blanco en un recipiente bastante grande para que se pueda colocar el cabezal por completo debajo del líquido. Luego, se agregan 40 gramos de bicarbonato de sodio por cada 240ml de vinagre y la solución debería hacer burbujas.
Una vez creada la solución, sumergir el cabezal y mantenerlo bajo el vinagre por al menos una hora. Luego, enjuagar y quitar el exceso de la solución y volver a colocarlo en la ducha.
Método 2
Este consiste en colocar una bolsa con vinagre directamente en el cabezal. Llenar una bolsa de plástico con vinagre y asegurarse que no tenga agujeros y soporte el peso del líquido. Agregar bicarbonato de sodio para preparar la mezcla y esperar a que burbujee. Así, colocar la bolsa en el cabezal todavía conectado a la ducha, sumergirlo por completo y atar la bolsa.
Dejar la bolsa por lo menos una hora y luego quitarla. Abrir la ducha para que el agua limpie el vinagre y listo.
Método 3
También se puede optar por limpiar puntos específicos del cabezal. Para ello, se quita el cabezal, se sumerge un trapo o un cepillo de dientes en vinagre y se limpia todo. Luego, se enjuaga bien con agua para quitar el resto y se coloca el cabezal nuevamente.
Método 4
Por último, si se busca una limpieza más profesional se pueden usar removedores de incrustaciones y removedores de óxido. También se puede limpiar la malla del filtro y el exterior del cabezal utilizando estos productos.
Fuente: la100.cienradios.com