Cada 19 de octubre el mundo se tiñe de rosa para generar conciencia de esta enfermedad y de la importancia de los controles frecuentes para la detección temprana de la misma. Los números alarman: por las restricciones y el miedo al contagio de covid 19, los chequeos bajaron un 50%.
Según datos del Instituto Nacional del Cáncer anualmente se diagnostica cáncer de mama a unas 19.000 mujeres y alrededor de 5.600 mueren por esa enfermedad en nuestro país. La estadística era pareja… hasta 2020. No hay registros oficiales, pero desde la Sociedad Argentina de Mastología aseguran que las consultas y chequeos descendieron en un 50% debido a la pandemia: se realizaron menos controles y menos intervenciones a causa de las restricciones y del miedo a contagiarse covid.
Este descenso preocupa a los expertos ya que podría derivar en un ascenso de la mortalidad, curva que comenzó a descender en los últimos años gracias a la concientización sobre la importancia de la detección temprana. ¿Por qué es importante? Porque mejora el pronóstico y en más del 95% de los casos permite una curación.
Según el Dr. Martin Engel, de la sección de patología mamaria del Hospital Alemán, se estima que 1 de cada 8 mujeres desarrollará cáncer de mama y, de acuerdo a datos de SAMAS, el 85% son diagnósticos esporádicos, es decir que se trata de pacientes que no tienen familiares directos con cáncer de mama.
Esto hace que los chequeos sean aun más importantes. En los últimos años, gracias a la multiplicidad de campañas al respecto, el autoexamen se convirtió en un test de rutina para muchas mujeres. Según la Dra. Karina Pesce, de SAMAS, «el autoexamen mamario está tan arraigado en las mujeres como el método más importante, en gran parte por los mensajes de comunicación que durante años se les transmitió, como ‘el cuidado de tus mamas está en tus manos'».
¿Por qué es importante el autoexamen? Porque las manos permiten detectar rápidamente una anomalía que deba ser revisada y esto es clave en una enfermedad que muchas veces no presenta síntomas. Un dato que desconoce la mayoría de las mujeres: según un estudio realizado por Fundación Avon, sólo 1 de cada 100 mujeres sabe que el cáncer de mama puede ser asintomático.
En esta línea, es importante la realización de estudios de rutina como mamografías. «En sus estadios iniciales el cáncer de mama no produce síntomas, por ello es fundamental la mamografía, que permite ver lo que aún no se puede tocar. Si se detecta el tumor en esta instancia temprana, la enfermedad alcanza su máximo nivel de curación», aseguran desde SAMAS.
Y es en ese punto donde los datos comienzan a alarmar. Según la Encuesta Regional de Opinión Pública sobre Cáncer de Mama 2021 realizada por Fundación Avon:
- 3 de cada 10 mujeres reconocen que la mamografía es el método de detección temprana más efectivo.
- 7 de cada 10 mujeres no realizaron consulta de rutina durante la pandemia.
- 7 de cada 10 mujeres mayores de 40 años expresan haberse realizado una mamografía al menos una vez en la vida.
- menos de la mitad (4,6%) de las mujeres se realiza mamografías anualmente.
Según Pesce el arraigo del autoexamen como método de detección temprana está difundido gracias a que se hizo una comunicación muy fuerte al respecto, y por ello entiende que “se deberá trabajar en posicionar a la mamografía como principal método de detección oportuna del cáncer de mama”.
«Todavía tenemos mucho por hacer tanto en educación como en acceso a los estudios», indica Antonio Lorusso, director médico de LALCEC y añade: «La educación debe estar dirigida tanto a la comunidad en general como así también a los profesionales médicos que son los que deben indicar la realización de mamografías como el principal estudio de detección de cáncer de mama”.
Fuente: lt10.com.ar