Este vegetal es rico en fibra y minerales como potasio, calcio, hierro y azufre, además de vitaminas B y C y antioxidantes.
La berenjena es un vegetal bajo en calorías que forma parte de la dieta mediterránea y es ideal para el organismo porque aporta fibra y una variedad de nutrientes, además de tener un alto contenido de agua.
Esta planta originaria de la India pertenece a la familia de las solanáceas, como el tomate y el pimiento. Sin embargo, es importante aclarar que no debe consumirse cruda debido a que contiene una sustancia alcaloide llamada solanina, que es tóxica. Con la cocción, ésta queda inactiva.
Con esa aclaración, se puede decir que se trata de un alimento que posee una importante cantidad de fibra, minerales como potasio, calcio, azufre e hierro, vitaminas B y C, serotonina, antioxidantes, y muy bajas calorías. Se puede disfrutar en diferentes preparaciones y recetas, ya sea horneada, hervida y salteada, entre otras.
Según información de Medical News Today, una porción de berenjena puede proporcionar al menos el 5 % de las necesidades diarias de fibra, cobre, manganeso, vitamina B-6 y tiamina que requiere una persona. También contiene otras vitaminas y minerales, y son una fuente de compuestos fenólicos que actúan como antioxidantes.
Su diversidad de propiedades las hace ideales para ayudar en el cuidado del organismo.
Salud del corazón
La fibra, el potasio, la vitamina C, la vitamina B-6 y los antioxidantes en las berenjenas ayudan a la salud del corazón.
Un estudio publicado en 2019 sugirió que comer alimentos que contienen ciertos flavonoides, incluyendo las antocianinas, ayuda a reducir los marcadores inflamatorios que aumentan el riesgo de enfermedad cardíaca.
En otra investigación, los científicos concluyeron que las mujeres que consumían cantidades suficientes de antocianinas parecían tener una presión arterial significativamente más baja y menos rigidez de las arterias que aquellas que consumían menos de estos compuestos.
De igual forma, desde hace un tiempo se habla de su potencial para reducir el colesterol y prevenir la arterioesclerosis. Su alto contenido de fibra puede ayudar en este propósito. Una taza de cubos de berenjena cocida, contiene alrededor de 2.4 gramos de fibra.
Los polifenoles de la berenjena pueden ayudar a proteger al cuerpo del cáncer. Las antocianinas y el ácido clorogénico protegen a las células del daño causado por los radicales libres. A largo plazo, esto puede ayudar a prevenir el crecimiento de tumores y el crecimiento de células cancerosas, precisa Medical News Today.
Las antocianinas pueden ayudar a lograr esto evitando que se formen nuevos vasos sanguíneos en el tumor, reduciendo la inflamación y bloqueando las enzimas que ayudan a que las células cancerosas se propaguen.
Otro de sus beneficios está relacionado con la función cognitiva. Los resultados de estudios en animales sugieren que la nasunina, una antocianina presente en la piel de la berenjena, puede ayudar a proteger las membranas de las células cerebrales del daño que causan los radicales libres. La nasunina también ayuda a transportar nutrientes a las células y eliminar los desechos.
Las antocianinas también ayudan a prevenir la neuroinflamación y facilitan el flujo de sangre al cerebro. Esto podría ayudar a prevenir la pérdida de la memoria y otros aspectos del deterioro mental relacionado con la edad.
Por otro lado, su fibra dietética puede ayudar a las personas a controlar su peso. Una persona que sigue una dieta alta en fibra tiene menos probabilidades de comer en exceso, ya que la fibra genera saciedad. Las berenjenas contienen fibra y son bajas en calorías. Sin embargo, es un alimento que puede absorber mucho aceite cuando se fríe, así que lo ideal es buscar otro tipo de preparación.
Salud de los ojos
Este vegetal también contiene los antioxidantes luteína y zeaxantina. La luteína desempeña un papel en la salud ocular y puede ayudar a prevenir la degeneración macular relacionada con la edad, que tiende a provocar la pérdida de la visión en las personas mayores.
La berenjena, al reunir ácido fólico, vitaminas y minerales, también previene dolencias en huesos y músculos, de manera tal que los adultos mayores la necesitan entre sus provisiones habituales.
Si bien la lista de beneficios y propiedades es larga, también es clave indicar que además de que no se debe consumir cruda, la berenjena no debe ser alimento para quienes padecen de alguna enfermedad inflamatoria de las articulaciones, por lo que antes de consumirla es mejor consultar al médico.
Fuente: www.airedesantafe.com.ar