La polémica está planteada por muchos dueños que están a favor y en contra. Aquí las claves para dilucidar qué hacer con ellos.
Los debates en lo que a dormir se refiere pueden ser infinitos. Está la discusión sobre el lado de la cama que elegimos, la de la cantidad de almohadas que usamos, la de si bajamos o no la persiana, etc.
Si además metemos a las mascotas de por medio, la cuestión es aún más peliaguda. Algunos amantes de los animales no dudan a la hora de tomar la decisión de si el animal debe o no subirse a la cama para dormir: para muchos, dormir junto a sus mascotas es un gusto.
Sin embargo, muchas otras personas consideran que no es higiénico y que no puede ser bueno para la salud. Entonces, ¿quién tiene razón? Y lo más importante: ¿supone algún tipo de peligro para las personas?
Los resultados de investigaciones muy serias demostraron que dormir con perros, sin importar si estaban en la cama o simplemente en la habitación, empeoraba el descanso de las personas y hacía que muchas se levantasen varias veces durante la noche. Una de las cosas que más afectaba era la postura en la que dormía el perro.
Aunque la calidad de sueño resultó ser menor que la de una persona que no duerme con animales en la habitación, los datos no son alarmantes ni motivo para expulsar a nuestras mascotas de la cama. Los resultados explican que las personas que durmieron con los perros en la cama consiguieron un 80% de eficiencia del sueño, aquellos que durmieron con los animales en la habitación un 83%.
Según los expertos una eficiencia normal es aquella que está entre el 85 y 89%, y una vez superado el 90% estaríamos hablando de una sueño muy eficiente.
Sin embargo, no hubo grandes diferencias en cuanto a la cantidad de veces que se despertaban las personas que dejaban pernoctar a sus animales en sus camas frente a las que no los tenían, ni tampoco en la cantidad de horas de sueño ni en lo cansados que estaban al día siguiente.
Más allá de la calidad del sueño, algunos expertos aseguran que el principal problema viene dado cuando los dueños tienen algún tipo de alergia o problema respiratorio.
Las personas con alergias a los animales o asma no deberían dormir con sus mascotas ni tampoco permitirles la entrada en la habitación, aseguran algunos científicos. Para algunas personas, sin embargo, puede ser incluso beneficioso ya que se sienten más seguras y calmadas cuando su perro duerme con ellas.
Por supuesto queda por sentado el mantener sanos a los animales de compañía. Esto implica llevarlos al veterinario con regularidad, vacunarlos, desparasitarlos y mantenerlos limpios ya que, aunque es pueden contagiarnos enfermedades.
Fuente: www.infobae.com