Un despertar renovado en medio de un contexto tan complejo como el actual puede transformarse en una odisea. A continuación, las claves para cada edad, la posición ideal y la importancia de un colchón y una almohada adecuados para cada situación.
Uno de los grandes placeres de la vida es dormir. No obstante, alcanzar un buen descanso puede resultar una tarea difícil en la que muchas veces no se encuentran rápidamente las respuestas. Durante el sueño intervienen factores como la temperatura del cuarto, el tipo de colchón y almohada, la edad, la posición del cuerpo, entre otras características. Pero, ¿Cómo se puede evitar levantar cansado?
En esa línea, el experto detalla los beneficios de consolidar un buen sueño: “Dormir bien mejora la memoria, aumenta la habilidad en el aprendizaje, ayuda a equilibrar el peso, colabora con la producción de hormonas, ayuda a proteger el corazón, contribuye a tener un sistema inmune más fuerte. Además, mejora el humor, genera más energía, la persona se ve más atractiva (rostro fresco) y colabora con los dolores cervicales, lumbares y dorsales en casi un 63%. El sueño no solo cuida el cuerpo sino que cuida la mente”.
Dentro de las principales consultas que llegan al consultorio de Siano tienen que ver con dolores cervicales y lumbares, mareos y dolores de cabeza, que generalmente guardan relación con la cervical. En ese sentido, el especialista en traumatología y ortopedia recomienda 7 claves para lograr un buen descanso.
1- Horas de sueño según la edad. Los niños de entre 6 y 12 años deben dormir, según indica el profesional, entre 9 y 11 horas. Por otra parte, esa cifra se reduce entre 7 y 9 horas en adolescentes y adultos. Por último, las personas mayores de 65 años tienen una recomendación de sueño de entre 7 y 8 horas.
2-La mejor posición para dormir. “Ni boca arriba ni boca abajo, lo indicado es de costado -de lado- y sobre todo del lado izquierdo, porque de ese lado se ubica el estómago que se encuentra en estado de relajación; y así evitamos reflujos, ronquidos, entre otras cuestiones”, señala Siano. Y agrega: “De costado se tiene que ver que toda la línea de la columna esté alineada desde la cabeza hasta la cola”.
3- La almohada ideal. “Es aquella que te permite que cuando estás apoyado se vea una línea casi recta entre el cuello, la espalda y la cintura”, asegura el médico traumatólogo. Su recomendación son las almohadas tradicionales de vellón -siliconadas-, que con el tiempo comienzan a aplastarse.
“No es que una almohada que al año se aplastó no sirve, eso duran las almohadas, se cambian al año o al año y medio. Se van a aplastar pero son las que mejor se adaptan al cuerpo. La mayoría de las almohadas de vellón también tienen un proceso especial antiácaros y antihongos para las alergias”, sugiere Siano.
4- Colchón cómodo para cada caso. En la actualidad, existen dos tipos de colchones: de poliuretano/goma espuma y de resortes. “Al elegir la almohada o colchón siempre debe ser lo que al paciente le resulta más cómodo. Lo recomendable es que el colchón tenga15 cm más de largo de lo que la persona mide y un grosor mínimo de 15 cm”, comenta el especialista en medicina regenerativa.
5- No consumir alimentos en forma abundante antes de dormir o no acostarse inmediatamente después de cenar, sino una hora después de la ingesta.
6- Conservar una temperatura cálida en el dormitorio de unos 22-23 grados.
7- Evitar el uso de celulares, tablets o televisores antes de acostarse. “Con el uso de los dispositivos, el cerebro entra en un proceso que capta los rayos y la luz”, asegura el experto.
Dormir bien es posible. Solo basta con tener en cuenta ciertas recomendaciones como las enumeradas por Siano para lograr consolidar un sueño profundo y renovador.
Fuente: www.infobae.com