A la hora de comer naranjas se debe estar muy atento a que éstas no estén llenas de moho y para eso tenemos algunos trucos que te van a sorprender.
Es imprescindible comer fruta a diario pero, en el mejor de los casos, habrá que elegirlas según la estación del año. Tanto los limones, como las mandarinas o las naranjas son frutas que uno suele comprar en todo momento pero se debe estar muy atento a que éstas no se llenen de moho y para eso tenemos algunos trucos que te van a sorprender.
Algunos creen que el moho únicamente arruina la cáscara de la fruta y que una vez removida puede ser apta para consumo. Pero esto no es así. En la mayoría de los casos el moho llega a infectar el fruto y, por esta razón, te contamos algunos trucos para evitar que éste arruine tus naranjas. ¡A tomar nota!
Diversos especialistas en alimentos recomienda cubrir las frutas con ceras y fungicidas. Sin embargo, el uso de estos productos no paraliza el proceso de descomposición de los cítricos. Por esta razón, son necesarios algunos otros pasos a seguir para evitar que el moho arruina nuestras frutas.
Cómo evitar que se echen a perder las naranjas. En primer lugar es importante elegir cuidadosamente las naranjas a la hora de comprarlas. Sea en el supermercado o en la verdulería, éstas deben ser elegidas con atención. Lo ideal es escoger aquellas que tengan la piel suave, firme y olorosa. De esta manera, se deberán descartar aquellas golpeadas o con pesos sospechosamente ligeros.
Una vez compradas se puede recurrir a otras técnicas para evitar que tus naranjas se echen a perder rápidamente. La clave es el almacenamiento. Es importante no colocarlas de cualquier manera en el recipiente donde guardas las frutas. Debe correr el aire entre ellas y, a ser posible, no deberían tocarse entre ellas.
Cómo evitar que se echen a perder las naranjas. Es sumamente necesario que a tus naranjas no les dé el sol. Por eso, lo mejor es guardarlas en un lugar seco, fresco y aireado. Además, es importante separar las piezas nuevas de las viejas o de aquellas con aspecto poco saludable. En caso de tardar muchos días en consumirlas lo mejor será guardarlas en la heladera.
Sin embargo, algunos especialistas creen que el frío no favorece a los cítricos ya que provoca que su piel se dañe y el fruto se descomponga. Por eso, es mejor siempre comprar aquello que estemos seguros que vamos a comer. Ahora sí, ¡a seguir comiendo frutas y verduras a diario!
Fuente: la100.cienradios.com